Puede que desde muy pequeño tuviste la suerte de nacer en una casa con perro o gato y jamás has vivido por consiguiente lejos de algún peludo, puede que hayas tenido que negociar durante horas con tus padres para que por fin accediesen a ampliar la familia con un animal de compañía y a partir de ese día entendiste el significado de la palabra «lealtad», incluso puede que tu primer perro o gato te haya llegado de mayor cuando te sentiste preparado para hacerte responsable de esta vida que te lo da todo, y pide muy poco a cambio.
Poco importa el cómo o de qué manera los animales entraron en tu vida, lo que vamos a ver hoy es el porqué, la razón por la cual una vez que uno asomó su hocico se quedaron todos para siempre en tu alma. Porque la frase «me gustan los perros» no se concibe en pasado, a uno no deja de gustarle los animales como quién dejó un hobby por falta de tiempo. Convivas o no con un peludo ahora mismo, si uno te robó el corazón, ya estás atrapado para siempre.
Algunas personas incluso deciden que quieren dedicar parte de su tiempo también para ayudar a los que no tuvieron tanta suerte, ya que hay miles de perros, gatos y otros animales, que a falta de un ser humano que les devuelva su voto de lealtad, han quedado varados en una protectora de animales.
El Voluntariado de Kimba es la representación de la responsabilidad y la solidaridad de una parte de la sociedad hacia los menos favorecidos. Personas que dedican parte de su tiempo y su energía a ayudar sin esperar nada a cambio, pero que sin embargo obtienen un elevado bienestar emocional.
La razón fundamental que mueve a los voluntarios que trabajan en una protectora es la de ayudar a los animales que han quedado desamparados para ofrecerles una segunda oportunidad, una nueva vida que les colme del afecto que les fue negado por quienes les maltrataron o abandonaron. Su objetivo: devolverles la felicidad.
Con su actitud y su trabajo intentan hacer del mundo un lugar mejor, más justo, más equilibrado y en definitiva más amable. Es difícil encontrar una razón mejor. En ellos se dan todas éstas cualidades:
- Generosidad hacia los más necesitados para compartir nuestras destrezas, habilidades o conocimientos en la implementación de soluciones.
- Altruismo para no esperar ninguna retribución por las acciones realizadas.
- Sensibilidad para ponerte en lugar de quién sufre (empatía).
- Compromiso con aquellos hechos que tienen lugar en nuestro entorno (o en otros lugares) y que requieren ayuda constante y eficaz por nuestra parte.
